A veces siento que habitas mi cuerpo,

que tu mirada es la mía y que respiras a través de mi...


Más de una vez he sentido que me tocas utilizando mis manos,

que tus modos son ahora los míos...


Tu presencia me hace inclinar la cabeza

y fundirme en la aceptación de lo que ahora somos.


Pasa el tiempo y cada vez estás más cerca...


Te veo en mis manos,

te escucho al escucharme respirar.

Mi piel es cada vez más la tuya.

Mis piernas sostienen tu cuerpo pasado y se actualiza mi futuro...


Me digo a ti: ¡Te amo!.

Te acaricio al tocarme.

Te veo al verme y me sonríes.


... es el tiempo de abismarnos juntos,

por eso es que todo está tranquilo, morirás conmigo...


Mientras tanto, leamos otro libro, Tota ...

Eratóstenes Flores. 20/02/2020.