Siempre que se señala esa habilidad del capitalismo capaz de hacer propios los movimientos que nacen en contra de él, me pregunto si dicha habilidad se sostiene sólo en la epidermis de las supuestas múltiples y variadas tribus urbanas. ¿Será que la fertilidad del capitalismo yace en la extensa superficialidad de los individuos?.

De no ser este el caso, me pregunto si existe algo así como una interioridad en nosotros donde la lógica de la explotacion ha echado sus raíces. Sería muy triste que de existir dicha interioridad, en el fondo de esa humanidad que se presume más que nunca diversa y conciente de las grandes necesidades de inclusión, se encontrara la semilla al parecer inquebrantable del capitalismo, "razón" que a todas luces nos está llevando al borde de la extinción.

¿Es que de verdad tenemos que vivir aceptando que la formación de libertades y autonomías es sólo posible como eslabón en la cadena de producción capitalista?. ¿Es únicamente el dinero aquello que permite el despliegue de nuestra voluntad?. ¿Es la bolsa de valores la que determina nuestra autonomía?.

¿Qué fue del arte?, ¿Qué fue de los artistas?.

¿Hemos perdido la posibilidad de su obra?.

Eratóstenes Flores. 16/10/2019.